7 de marzo de 2012

El número mágico de la música

Existe un número más utilizado que ningún otro en música. Vas a encontrarlo fácilmente y te darás cuenta que aparece casi siempre, en cuanto empiezas a pensar musicalmente, en cuanto comienzas a sentir la música como algo más que un simple acompañamiento distraído.
En primer lugar, y aunque te parezca extraño, debes saber que la música está completamente llena de relaciones numéricas. Dicho de otro modo: la música y las matemáticas están profundamente relacionadas. La música, al igual que las matemáticas, busca el equilibrio. Ese equilibrio se dirige al que escucha y le produce la sensación de que lo que está oyendo está completo, nada le falta: está equilibrado. La música consigue esto de muchas maneras. Una de esas maneras es por medio de la estructura, de la forma.
Tomemos una canción. Si no sabemos analizarla, entrar en ella, en su estructura, no importa, porque si la canción está bien construida, si respeta las relaciones matemáticas, aunque no sepamos por qué, nos produce una sensación de algo bien hecho y completo, redondo.
En muchas ocasiones aparece el número que estamos buscando, y todos los compositores de canciones respetan ese número y construyen la estructura de su canción a partir de él.

Te propongo algunas actividades para que descubras ese número. Vamos a comenzar con una antigua canción muy conocida, que aparece en una película que seguramente has visto, Pretty Woman.
La canción es It Must Have Been Love, de Roxette. Comencemos por escucharla completa mientras vemos el vídeo. Haz clic en la imagen de la izquierda.
Después vamos a leer la canción en inglés y su traducción al castellano.
Te he propuesto esta canción porque es muy fácil de medir y de entrar en su estructura.
Ahora vamos a marcar el compás. Es tan fácil que en seguida te darás cuenta de que es un compás de...
Efectivamente, es un compás de...

Y ahora vamos con la estructura. Una canción tiene dos partes: estrofas y estribillos. Cuando "sientas" que empieza algo, estrofa o estribillo comienza a contar y a medir con la mano de este modo:

1-2-3-4, 2-2-3-4, 3-2-3-4, 4-2-3-4, etc.

Cada uno de los grupos es un compás.

Cuando "sientas" que algo dentro de la canción ha terminado, y además escuches claramente que la batería hace algo distinto, para de contar. ¿A qué número has llegado? ¿Cuántos compases has contado?
Efectivamente, ese es el número mágico de la música.
Si quieres comprobar todo esto desde el punto de vista de un músico, en este enlace puedes bajar la partitura en formato PDF. Así es como un músico la ha escrito para voz y acompañamiento de piano.

Pruébalo en otras canciones y verás que se repite. Hazlo por ejemplo con esta famosa canción de los Beatles: Let it Be, que te pongo en una versión subtitulada para que entiendas la letra.
Haz clic en la imagen y trata de medir esta canción del modo que ya has aprendido. Verás como todo lo explicado sobre la estructura y el número de compases se cumple. Cuando la midas no te dejes engañar porque creas que el pulso es lento. Sigue oyendo y captarás el verdadero pulso de la canción.

Ahora tú puedes escuchar tus canciones y tratar de encontrar la estructura que han utilizado los músicos.

La tarea que debes traerme para el próximo día es un enlace de un vídeo de Youtube en el que hayas analizado su estructura. Envíame ese enlace y tu análisis, al correo que ya conoces.

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